La
acción del Estado nazi en el campo ideológico
Elemento
clave de la ideología nazi fue la cuestión
racial. |
Mein Kampf |
Hitler hablaba
en su Mein Kampf de la existencia
de razas superiores y razas inferiores.
El pueblo alemán pertenecía al primer
grupo.
Para evitar su contaminación y conservar
la pureza racial era menester
proceder a una profunda segregación.
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Especialmente peligrosa
estimaba que era la raza judía,
a la que calificaba como degenerada
y causante de gran parte de los males de Alemania.
EL
ANTISEMITISMO (odio a
los judíos) existía en Europa
desde hacía siglos. Pero los nazis lo elevaron
a la máxima categoría. |
Dibujo antisemita |
Invasión de Polonia
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Otro
ingrediente esencial de esa ideología era
la cuestión del “espacio
vital”.
Según esta teoría, Alemania necesitaba
expandirse allende sus fronteras para canalizar
su crecimiento demográfico y potenciar
su desarrollo económico. |
Para ello era preciso quebrantar
las limitaciones impuestas por el Tratado
de Versalles y conquistar territorios,
especialmente en el oriente europeo, a costa de
los pueblos eslavos, Polonia y el inmenso
territorio soviético. |
La
educación se utilizó como instrumento
de adoctrinamiento en los ideales
del nazismo. Todos sus niveles se vieron sometidos
a un riguroso control y los profesionales
de la enseñanza fueron depurados y encuadrados
en una estructura de carácter pseudomilitar.
Los programas de estudios se
desarrollaron bajo las premisas de un profundo
racismo. |
JJ. Hitlerianas
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Cartel sobre arte degenerado |
La
cultura en general y el arte en particular,
experimentaron una profunda selección,
siendo reprobado y perseguido el llamado “arte
degenerado” ("Entartete
Kunst"). Bajo este epígrafe
se clasificaron las tendencias vanguardistas
(cubismo, dadaísmo, fauvismo,
impresionismo, etc) y artistas
como Picasso, Van Gogh, Munch, Kandinsky, Klee,
entre otros. |
En 1937 se celebró
una exposición en Munich
cuyo objeto era recuperar lo que Goebbels había
calificado como “esencia del arte
alemán”. En ella predominó
el estilo figurativo y
géneros como los bodegones, los
paisajes y la figura humana a través de
la cual se exaltaba el ideal de belleza y perfección
de la raza aria. |
Gran exposicióm de Arte
Alemán. 1937 |
En 1933 fue instituida la
Cámara de la Cultura del Reich,
de la que pasaron a depender siete organismos:
cine, teatro, música, prensa, radio,
literatura y arte, y en la que debían
inscribirse de forma obligatoria los profesionales
que desarrollaran alguna de esas actividades. |
Los
libros y la prensa fueron estrechamente vigilados
por medio de la censura, prohibiéndose
la publicación de aquellos ejemplares juzgados
como depravados o atentatorios
contra el régimen. |
Bertolt Brecht |
Se quemaron
públicamente miles de volúmenes, como
aconteció el 10 de mayo de 1933. Numerosos
escritores debieron huir (Thomas
Mann, Bertolt Brecht, Stephan Zweig y otros).
La censura se extendió también
a otras manifestaciones expresivas como el cine
o la radio. |
El
régimen invirtió grandes esfuerzos
en el control y adoctrinamiento de la juventud.
Ésta fue encuadrada en organizaciones, entre
las que destacó la de las "Juventudes
Hitlerianas", a cuyos miembros les
eran inculcados los principios del nazismo. Se hizo
énfasis en el cuidado físico y deportivo,
por ser considerados medios idóneos para
el mantenimiento de una raza sana y fuerte, base
del futuro ejército alemán. |
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Todas esas organizaciones fueron
sometidas a una rígida disciplina castrense. |
Apoyo a la maternidad
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El
papel de la mujer, aunque en menor medida
que en otros regímenes similares, se circunscribió
a la esfera doméstica y
su función principal quedó reducida
a la de engendrar y educar a los hijos. Desde niños,
hombres y mujeres eran separados
y encuadrados en razón a su sexo. |
Se ensalzó el papel
de madre y se instituyó
una festividad para conmemorarlo, llegándose
a conceder premios a la fertilidad a aquellas mujeres
que lograsen una mayor descendencia. |
Determinadas libertades
que habían sido
conquistadas por la mujer durante la República
de Weimar fueron suprimidas y sus puestos laborales
ocupados por los varones. Solo cuando durante la
II Guerra mundial escaseó la mano de obra,
se acudió de nuevo a las mujeres
como sustitutas de los
varones. |
Junto
con el terror, la propaganda fue empleada como forma
de imponer las ideas. |
Se generalizó
la celebración de imponentes concentraciones
de masas, presididas por Hitler
y los máximos dirigentes del partido donde,
en un ambiente de enardecido patriotismo
donde se enarbolaban los símbolos
nazis (estandartes y banderas
con la esvástica, saludos marciales, etc). |
Desfile |
Concentración nazi
|
Se construyeron
escenarios permanentes para este
tipo de manifestaciones, como el diseñado
por Albert Speer -el
más prestigioso arquitecto del régimen-
en Nuremberg, que contaba con
estadio, sala de congresos y amplias avenidas para
el desarrollo de desfiles. |
La
arquitectura se empleó como instrumento
de enaltecimiento del régimen. Surgieron
fastuosos proyectos, como el de Germania,
diseñado por Speer, una ciudad dotada
de formidables edificios y avenidas, destinada a
ser la nueva capital del mundo. |
Proyecto de ciudad
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La Segunda Guerra Mundial truncó
la realización de dicho sueño. |
Hitler
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En
el centro de todos esos fastos se situaba
la figura del Führer. Incluso
los Congresos del Partido, desprovistos
de un verdadero carácter deliberativo, se
convocaban para exaltar su figura. Se alteró
el calendario laboral y se instituyeron nuevas festividades
como la que conmemoraba el cumpleaños de
Hitler. |
Su imagen
se representó hasta la saciedad en las más
diversos escenarios y actitudes: militar, político,
familiar, paternal, etc. |
Figura
insustituible en la organización del aparato
propagandístico del régimen
fue Joseph Goebbels. Mediante inflamados
discursos radiofónicos y artículos
de prensa, cargados de antisemitismo y xenofobia,
encandiló a las masas. |
Joseph Goebbels
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Durante la II Guerra Mundial
sus alocuciones se esforzaron en
sostener la moral del pueblo alemán alentándolo
a una heroica resistencia, cuando ya era
inevitable la derrota del Tercer Reich. |
Eclesiástico saludando al
estilo nazi |
Respecto
a las relaciones con la Iglesia, los nazis
intentaron controlar las dos confesiones
más importantes de Alemania, la Evangélica
(mayoritaria) y la Católica.
Con la Santa Sede firmó
un acuerdo en julio de 1933 que regulaba las relaciones
entre ambas instituciones y contribuyó a
incrementar el prestigio internacional
del régimen. |
A la postre, sin embargo, esas
relaciones se enfriaron, ya que
una parte del clero recelaba del control que Hitler
ejercía sobre el Estado y los métodos
que utilizaba para perpetuarse en el poder. |
El antisemitismo nazi
Otros fascismos
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