El término Restauración
hace alusión al período
comprendido entre la definitiva caída de
Napoleón (1815) y el
inicio del proceso revolucionario europeo de 1830.
Durante el mismo la monarquía francesa es
restaurada en la figura de Luis
XVIII de Borbón, hermano de Luis
XVI y sucesor de su sobrino Luis XVII, que nunca
llegó a reinar y que murió en 1795,
prisionero de la revolución.
En Europa esta etapa se caracterizó por
el intento de recomposición del entramado
del Antiguo Régimen, algo
que sus partidarios consiguieron solo parcialmente.