Sustancia empleada en medicina
por sus propiedades antipiréticas
(contra la fiebre) y analgésicas.
Su origen es peruano y es el principal remedio
contra la malaria, también
denominada paludismo. El paludismo
se transmite por la picadura de la hembra del mosquito
Anopheles, que inocula parásitos
del género plasmodium y causan la muerte
o la postración a millones de personas de
las zonas tropicales.
Antes del empleo de la quinina el hombre blanco
tuvo vetada la entrada a vastas áreas donde
el paludismo era endémico
(permanente). En unión de otros
factores sanitarios, su uso posibilitó la ocupación de extensos territorios del continente
africano.