Artículo Nº 33
24 de agosto de 2009
ISSN 1989-4988
DEPÓSITO LEGAL MA 1356-2011 |
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ANTONIO AGUILAR BARAJAS
Espartanos, guerreros del Peloponeso.
RESUMEN
“Caminante, ve a Esparta y dile a sus ciudadanos que aquí yacemos por obedecer sus leyes”.
Este es el esclarecedor epitafio que dedicó el poeta Simónides al contingente espartano muerto en las Termópilas a las órdenes del inmortal rey Leónidas. Este hecho, la autoinmolación de unos soldados en defensa de unos ideales de libertad y ciudadanía frente al intento de subyugar a la civilización griega por parte del imperio persa es la base del mito y la clave para entender la imagen romántica que ha llegado hasta la actualidad del pueblo espartano, como reflejo de una sociedad que era capaz de sacrificar a sus ciudadanos en el campo de batalla siguiendo los dictados del estado, por obedecer la ley de la que ni los reyes estaban exentos y cumpliendo a rajatabla un código ético que acompañaba al espartano de pleno derecho desde su nacimiento hasta su muerte.
Temidos, odiados y amados al mismo tiempo, el guerrero espartano ha llegado hasta nuestros días como imagen insuperable de sacrificio y abnegación por la comunidad, la obediencia al estado y el desprecio por la propia vida en aras de las leyes de Esparta, concepto al que temían más que a la propia muerte.
PALABRAS CLAVE
Esparta, Lacedemonia, Hoplitas, Éforos, Agogé.
DATOS DEL AUTOR/A
Antonio Aguilar Barajas.
Licenciado en Historia por la Universidad de Málaga.
toninigz@yahoo.es
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