“Nosotros hace tiempo que hemos abandonado la
SDN porque conforme a su origen y a sus obligaciones,
nos ha negado el derecho a la igualdad de armamento
y, por consiguiente a la igualdad en la seguridad. No
volveremos más porque no tenemos la intención
de dejarnos, en un punto cualquiera del mundo, encadenar
a la defensa de la injusticia por la decisión
de una mayoría de la SON, y porque creemos rendir
así un servicio a todos esos pueblos que la desgracia
arrastra a apoyarse en la SDN y a otorgarle su confianza
considerándola como un factor de ayuda real.
Habíamos considerado, como más justo,
en el caso de la guerra de Abisinia, por ejemplo, en
primer lugar, tener una mayor comprensión hacia
las necesidades vitales de Italia y, en segundo lugar,
conceder menos esperanzas y, sobre todo, menos promesas
a Abisinia. Ello habría podido, quizá,
acarrear una posible solución más amplia
y más razonable de todo el problema.
Nosotros no tenemos en absoluto la intención,
en un caso grave, de dejar implicar a la nación
alemana en conflictos donde no estuviera interesada
ella misma [Alemania]. No estamos dispuestos a intervenir
en favor de intereses económicos o territoriales
de otros sin que haya a la vista la menor ventaja para
Alemania. Por otra parte, nosotros mismos no esperamos
un apoyo tal de otros pueblos. Pero si una parte de
los intereses alemanes llegaran a ser seriamente puestos
en juego, no nos esperaremos nunca a obtener de una
SDN un apoyo tangible; al contrario, suponemos, "a
priori", que habremos de hacer frente nosotros
mismos a los problemas que se deriven de ello.
En fin, nosotros no tenemos en el futuro la intención
de dejarnos trazar por cualquier institución
internacional una línea de conducta que, excluyendo
el reconocimiento de estados de hecho indiscutibles,
no tiene nada que ver con el comportamiento de gentes
reflexivas, pero emparentadas con la política
de la avestruz.”
Discurso de Hitler pronunciado en el Reichstag.
20 de febrero de 1938.
Recogido en M. Chaulanges y otros.