“Los reyes son llamados justamente dioses, pues
ejercen un poder similar al divino. Pues si consideráis
los atributos de Dios, veréis cómo se
encuentran en la persona de un rey (...). De la misma
forma que es impío y sacrílego hacer un
juicio sobre los actos de Dios, igualmente es temerario
e inconsciente para un súbdito criticar las medidas
tomadas por el rey.”
Jacobo I de Inglaterra. Reinó entre
1603 y 1625.