“Camisas negras de la revolución, hombres y mujeres de toda Italia, italianos y amigos de Italia allende de los montes y de allende de los mares, escuchadme:
El mariscal Badoglio telegrafía: Hoy, 5 de mayo, a las 16 horas, a la cabeza de las tropas victoriosas, he entrado en Addis-Abeba”.
En el transcurso de treinta siglos de su historia, Italia ha vivido muchas horas memorables, pero la de hoy es ciertamente una de las más solemnes. Yo anuncio al pueblo italiano y al mundo que la guerra ha terminado. Anuncio al pueblo italiano y al mundo que la paz ha sido restablecida.
No sin emoción y sin orgullo, y después de siete meses de terribles hostilidades, pronuncio esta gran palabra, pero es estrictamente necesario que añada que se trata de nuestra paz, de la paz romana, que se expresa por esta simple, irrevocable, y definitiva proposición: Etiopía es italiana.”
Benito Mussolini. La doctrina del fascismo, artículo de la Enciclopedia Italiana, 1932.