“A la nación francesa:
Desde hace algunos días el estado de Europa se
ha agravado considerablemente, pese a los esfuerzos
de la diplomacia. El horizonte se ha ensombrecido.
En estos momentos, la mayoría de las naciones
han movilizado sus fuerzas. Incluso los países
protegidos por la neutralidad han creído que
era su deber adoptar esta medida a título de
precaución (...).
Solícito de su responsabilidad, sintiendo que
faltaría a un sagrado deber si dejase las cosas
en tal estado, el Gobierno acaba de firmar el decreto
que imponen las circunstancias.
La movilización no es la guerra. En las circunstancias
actuales, al contrario, se nos aparece como el mejor
medio para asegurar una paz honrosa (...).
En este momento no hay partidos; sólo existe
la Francia eterna, la Francia pacífica y resuelta,
la Francia del derecho y de la justicia, eternamente
unida en la calma, la vigilancia y la dignidad.
Firmado por el presidente de la República, Raymond
Poincaré, y por el presidente del Consejo, René
Viviani, el 2 de agosto de 1914."
Movilización del ejército
francés. 2 de agosto de 1914.